¿De qué va el nuevo modelo de la medicina energética?

En el nuevo modelo de la medicina energética, la conciencia, el darnos cuenta de nuestro cuerpo, nuestra mente, nuestras emociones, nuestras ideas, desempeña un papel integrador en la salud y en la enfermedad. La conciencia es un tipo de energía en si misma, es como la luz que da calor y claridad que ilumina todo lo que toca. A veces se le ha denominado como “el fantasma de la máquina”.

En occidente hemos tardado muchos mas años en aceptar que la energía juega un papel muy importante en la salud, y aun se siguen debatiendo aunque ya hay muchos estudios científicos serios que demuestran fehacientemente que existen los campos electromagnéticos internos y externos en el ser humano. Además hoy en día la medicina moderna utiliza una serie de instrumentos de diagnóstico basados en la lectura de las energías que emite nuestro organismo, y en base a ello trata diferentes problemas de salud.
Tanto los científicos como los terapeutas energéticos han descubierto hechos que han alterado los conceptos de las energías humanas y de hecho existe un campo llamado Human Energetics que han descubierto similitudes entre los investigadores médicos modernos con los terapeutas energéticos tradicionales y estas dos formas estan empezando a validarse mutuamente. La investigación medica esta demostrando que hay aparatos que producen campos magnéticos pulsantes con determinadas frecuencias que pueden estimular la curación de ciertos tejidos. Se está validando las teorías de los campos magnéticos oscilantes para tratar los huesos, nervios, piel, capilares y daños de los ligamentos, y estos mismos campos magnéticos se han descubierto en las manos de ciertos terapeutas entrenados. Se han descubierto métodos para medir importantes campos energéticos sutiles dentro y alrededor del cuerpo humano. Hace unos años estos campos se consideraban no existentes por la comunidad académica medica. No solo se esta documentando la presencia de estos campos sino que también se está investigando como se pueden generar estos campos y como se alteran por la enfermedad y el desorden.
La medicina energética está apuntando en una dirección obvia y es que podemos participar de nuestra curación si enfocamos las energías de nuestro cuerpo adecuadamente para que este consiga las condiciones necesarias para reparar los procesos destructivos.