Hay que ser consciente de nuestros pensamientos. Este sería el primer paso para ser capaces de eliminar esos pensamientos negativos o de autocrítica que nos decimos una y otra vez.
Para ello es importante examinar esos pensamientos negativos, ese diálogo interno que nos decimos una y otra vez. Es importante anotar esos pensamientos negativos que nos decimos a lo largo del día, y también pedirles a las personas significativas que nos rodean que nos llamen la atención cuando nos pillen diciéndonos cosas negativas.
Una vez que tengamos “la lista” de las cosas que nos decimos a nosotros mismos, sería conveniente que tratáramos de ver a quién nos recuerdan estas frases y/o que emociones o sentimientos nos producen.
Muchas veces lo que estamos es repitiéndonos frases que nos han dicho otros, normalmente personas significativas, esas personas a las que nosotros le hemos otorgado poder sobre nosotros. Es muy probable que os hayáis fiado de la “experta opinión de alguien” y a partir de ahí os habéis creído que no seréis capaces de tal o cual cosa.
Una vez que habéis asumido la experta opinión de alguien, y vuestro comportamiento ha sido acorde reforzáis esa creencia, y si se repite una vez más la volvéis a reforzar y poco a poco se convierte en automática. A veces una sola ocasión también puede servir para instalar la creencia, como los “traumas” que hemos sufrido por un solo incidente.
Pues bien, la mejor manera de eliminarla es tomar conciencia del pensamiento negativo o creencia limitadora, de quién nos lo dijo, cuestionar “la experta opinión de esta o aquella persona o de la sociedad en la que vivimos” y ponernos manos a la obra utilizando todos nuestros recursos, precisamente para evitar que esa persona tenga razón (a veces el rebelarse consigue reunir la motivación necesaria para ponerse en marcha).
Romper este patrón puede ser más fácil de lo que creéis, lo vais a poder hacer cuando os deis cuenta de que estas creencias limitantes son imaginarias y auto impuestas.
Para conseguirlo hay que tener en cuenta varias cosas:
- ¿Queremos cambiarlas?
- ¿Sabemos como cambiarlas? (tenemos un plan)
- Poner en marcha el plan
- Darle un tiempo al plan
- Daros cuenta si está funcionando o no y adecuarlo para que funcione.