Decía Sócrates que estar enamorados nos hacía sentir en permanente necesidad. Sufrimos ansiedad de separación y dependencia. Nos volvemos adictos y sufrimos los 3 síntomas clásicos de la adicción, también en el amor pasional: tolerancia, abstinencia y reincidencia.
Nos han contado que el amor cuando es verdadero, duele. Pero cuando una persona te quiere, no te hace daño.
Hemos escuchado tantas veces hablar del “amor incondicional”, el llamado amor sin límites. Se podría definir con esta frase: “hagas lo que hagas, te amaré”. Hay mucho tema cultural en este concepto y puede ser un principio detonante del maltrato.
Está el “amor subordinado”, donde “todo lo hago por ti, vivo para ti”. Aquí la persona pierde su identidad, es un atentado contra la salud mental.
El “amor autodestructivo”, muy visible en relaciones de dependencia donde no puedo estar contigo, pero no puedo estar sin ti. Aniquila la autoestima.
Nos han dado el mensaje erróneo de EL AMOR TODO LO PUEDE. Eso nos enseñan desde los cuentos, en las películas de amor, en las novelas…. el amor todo lo puede y así vamos creciendo y creyendo que con el amor basta.
Pero este aprendizaje es ancestral, historias mitológicas que han ido dejando una impronta en nuestra manera de amar.
La Historia de los Seres Completos
El origen de un dicho popular, concretamente el de la búsqueda de la media naranja,
nace en el año 380 a.C. en “El Banquete” de Platón.
El filósofo Aristófanes intenta explicar qué es el Amor. Según su teoría, en la
antigüedad existían los llamados seres redondos, eran seres que poseían en partes
iguales lo masculino y lo femenino.
Físicamente eran redondos, su espalda y costados tenían forma de círculo, poseían 4
brazos, 4 piernas, 4 pies, 4 manos, 2 caras en la cabeza y por supuestos, 2 órganos
sexuales diferenciados. Estaban unidos por el vientre (ombligo) y poseían una
extraordinaria fuerza y vigor.
Eran además muy orgullosos y se sentían tan superiores que llegaron a conspirar
contra los propios dioses. Zeus, que era omnipresente, se enteró de esta conspiración
y como no podía destruir a toda la raza humana, ya que era la encargada de adorarlos
a ellos, a los dioses, deliberó detenidamente en cómo descargar su furia.
Así urdió el peor castigo posible: decidió partirles con un rayo, cortarles por la mitad y
hacerles más débiles. Así cumplió un triple objetivo: venció su orgullo, los debilitó y a la
vez los separó (visión pragmática de los dioses, más adoradores más ofrendas).
El dios Apolo curó a los entonces llamados seres cortados y les fue dando la forma
actual que tienen ahora ambos sexos. Los seres así cortados y curados, se sentían solos
e incompletos y se dedicaron a buscar a su otra mitad. El Amor, desde tiempos
inmemoriales, trata de unirlos de nuevo…
Concluye Aristófanes en su discurso diciendo que:
Cada uno está buscando siempre su propio símbolo…por eso cuando cada uno
encuentra aquella auténtica mitad de sí mismo, queda entonces maravillosamente
impresionado, por afecto, afinidad y amor, sin querer separarse… Amor es, en
consecuencia, el nombre para el deseo y la persecución de esa integridad.
De manera que, cuando se encuentran se
unen de tal forma que es para toda la vida,
tratando cada uno de reunirse y fundirse con
el amado y convertirse de dos seres en uno
solo. Se alcanzará la felicidad en nuestra
especie cuando se dé el tiempo en que la
mitad de la Humanidad se encuentre con su
otra mitad y volvamos a ser seres completos.
Y así nos han ido contando y hemos ido creyendo que necesitamos del otro para ser seres completos. La realidad es que somos seres completos por nosotros mismos, el mito de la media naranja puede parecer romántico, pero para vivir en pareja, en la convivencia, sólo con el amor no es suficiente. Vivir en pareja es otra cosa, la historia empieza con “erase una vez”… pero no siempre comemos perdices y vivimos felices.
Junto con el amor es necesario: RESPETO, NEGOCIACIÓN, HABILIDADES DE COMUNICACIÓN, TÉCNICAS DE SOLUCIÓN DE PROBLEMAS, ASERTIVIDAD, APRENDER A
PEDIR, SABER AYUDAR, EXPRESAR LAS EMOCIONES, HACER CRÍTICAS CONSTRUCTIVAS, INTELIGENCIA EMOCIONAL, DESEAR Y SEDUCIR…MANTENER VIVO EL INTERÉS.
“Si no eres capaz de amar y que te amen con dignidad, mejor no ames”
Porque no hay mejor aprendizaje que el amor propio para poder ser generoso en el amor, ya que no hay amor suficiente capaz de llenar el vacío de una persona que no se ama a sí misma.