Que las mujeres vivan dignamente y libres de violencia es un deseo que Victoria Cadarso Team también apoya y demostró con su presencia en el encuentro ??Women for Change?, que reunió la noche del miércoles en Madrid a más de un centenar de mujeres influyentes para debatir sobre los retos conjuntos para lograr la igualdad de género.
Un evento organizado por la Fundación Esperanza Pertusa de la firma española Gioseppo, cuya protagonista fue Caddy Adzuba, activista y periodista congoleña y Premio Príncipe de Asturias de la Concordia 2014 por haber denunciado a nivel internacional la brutal violencia que sufren las mujeres en su país a causa del conflicto armado.
Junto con Caddy trabaja mi sobrina Lorena Aguirre en la ONGD Coopera ofreciendo apoyo psicológico a estas mujeres, víctimas de violaciones y todo tipo de abusos.
Con nuestra presencia en este evento queremos dar voz a estas mujeres y apostar porque se ofrezcan ?ayudas más sinceras a la labor que estas dos grandes mujeres junto con su equipo están desarrollando en El Congo para que más mujeres, niños y niñas puedan alcanzar un mayor desarrollo humano.
El proyecto “Women for Change” tiene como objetivo, en primer lugar, la asistencia psicosocial de estas mujeres a través, por ejemplo, de talleres educativos para mejorar su autoestima y empoderamiento. Y en segundo lugar, la creación de diferentes proyectos productivos, como la fabricación de jabones y cremas, para procurar su supervivencia y la de sus familias. El proyecto también plantea la construcción de un hogar refugio para atender a las mujeres en situación de emergencia.
Si deseas saber más sobre este evento y la Fundación Esperanza Pertusa y su labor consulta www.w4c.es/
La guerra en El Congo no es una guerra de los congoleños, “pero es una guerra debida al progreso tecnológico, por el coltán que procede del Congo”, asegura Adzuba. El coltán, que es un mineral presente en los smartphones, los portátiles y en otros dispositivos electrónicos, hace que empresas multinacionales estén interesadas, financien las armas y provoquen situaciones de guerra.
La violación de mujeres no es más que otra estrategia que permite conseguir los objetivos de esta guerra porque “la mujer es la figura central de la familia y el país no puede existir sin la familia”. Al violar a una mujer en Congo, aparte de sufrir las lesiones físicas y los traumas psicológicos y emocionales que conlleva tal acto, la víctima queda totalmente aislada en la sociedad porque el tema del sexo en Congo es tabú. “Al ser violadas, las rechaza hasta su marido”, añade Adzuba. Al destrozar a la figura central de la familia, que es a su vez la base de la sociedad, consiguen destrozar y controlar la sociedad y así, ganan la guerra.
Hasta que no se vaya a las causas últimas del conflicto congoleño no dejarán de cometerse estos actos de violaciones como armas de guerra. Esto es lo que desea transmitir la Fundación Esperanza Pertusa con su proyecto “Women for Change”.
Quieren que “Women for Change” sea mucho más que palabras. Desde la fundación quieren contribuir a que más mujeres vivan dignamente y libres de violencia. Por ello lanzan la pulsera W4C cuyos beneficios se destinarán íntegramente a ayudar a la reinserción psicosocial y laboral de mujeres víctimas de la violencia en la República Democrática de El Congo
Con nuestra presencia en este evento queremos dar voz a estas mujeres y apostar porque se ofrezcan ?ayudas más sinceras a la labor que estas dos grandes mujeres junto con su equipo están desarrollando en El Congo para que más mujeres, niños y niñas puedan alcanzar un mayor desarrollo humano.
El proyecto “Women for Change” tiene como objetivo, en primer lugar, la asistencia psicosocial de estas mujeres a través, por ejemplo, de talleres educativos para mejorar su autoestima y empoderamiento. Y en segundo lugar, la creación de diferentes proyectos productivos, como la fabricación de jabones y cremas, para procurar su supervivencia y la de sus familias. El proyecto también plantea la construcción de un hogar refugio para atender a las mujeres en situación de emergencia.
Si deseas saber más sobre este evento y la Fundación Esperanza Pertusa y su labor consulta www.w4c.es/
La guerra en El Congo no es una guerra de los congoleños, “pero es una guerra debida al progreso tecnológico, por el coltán que procede del Congo”, asegura Adzuba. El coltán, que es un mineral presente en los smartphones, los portátiles y en otros dispositivos electrónicos, hace que empresas multinacionales estén interesadas, financien las armas y provoquen situaciones de guerra.
La violación de mujeres no es más que otra estrategia que permite conseguir los objetivos de esta guerra porque “la mujer es la figura central de la familia y el país no puede existir sin la familia”. Al violar a una mujer en Congo, aparte de sufrir las lesiones físicas y los traumas psicológicos y emocionales que conlleva tal acto, la víctima queda totalmente aislada en la sociedad porque el tema del sexo en Congo es tabú. “Al ser violadas, las rechaza hasta su marido”, añade Adzuba. Al destrozar a la figura central de la familia, que es a su vez la base de la sociedad, consiguen destrozar y controlar la sociedad y así, ganan la guerra.
Hasta que no se vaya a las causas últimas del conflicto congoleño no dejarán de cometerse estos actos de violaciones como armas de guerra. Esto es lo que desea transmitir la Fundación Esperanza Pertusa con su proyecto “Women for Change”.
Quieren que “Women for Change” sea mucho más que palabras. Desde la fundación quieren contribuir a que más mujeres vivan dignamente y libres de violencia. Por ello lanzan la pulsera W4C cuyos beneficios se destinarán íntegramente a ayudar a la reinserción psicosocial y laboral de mujeres víctimas de la violencia en la República Democrática de El Congo